jueves, 24 de septiembre de 2009

Te veo, te veo cada vez.


Te veo cada vez más grande y más lindo. Te veo tan chiquito pero a la vez tan enorme. Te veo desde el principio, y hasta el final. Te veo con el guardapolvo cuadrille pastel, y con el blanco. Te veo con granos en la cara y la voz aguda. Te veo con barbita crecida y arito en la oreja. Te veo rockero como mamá y deportista como papá. Te veo veo fumando y tomando y veo como te mato. Te veo con alguna zorra a la que dedicaremos malos pesamientos aunque no te lo digamos. Te veo recibiéndote de lo que más te guste, te veo de traje aunque sea sólo una vez, te veo jugando el torneo de ex-alumnos. Te veo con tus amigos, y me veo a mí ahí, porque somos amigos desde que eras una idea, y lo vamos a ser hasta que no exista más. Pero te veo de nuevo en serio, tan chiquito, y tan lindo, cada vez más y tan frágil, ingenuo, puro, y es tanto lo que ya te quiero, que entonces a pesar de querer que crezcas y entiendas nuestra amistad, me angustia que sea cada vez más difícil sostenerte entre los brazos, no entiendo como tus dimensiones cambian tanto de una semana a la otra, ni por qué aprendés tan rápido muecas nuevas, me enoja que estés creciendo a este ritmo. Entonces convivo con esa contradicción entre el "Muy bien Brunito, seguí creciendo así" y el "Que sea la última vez".

miércoles, 23 de septiembre de 2009

PRIMAVERA

Todavía hace 6º pero ya estamos en primavera.
Sigo sintiendo el frío pero la primavera se siente igual,
y cada vez más.
En todos los planos y sentidos.
Y aunque el tiempo sigue pasando igual de rápido y cada vez más (agravado porque los años se me vienen encima como todas las primaveras),
sale el sol.
Y sale en todos lados.
Sale en la terraza, sale en la calle, sale en la puerta,
en el patio del colegio, en la ventana del aula, en el balcón,
y sale aunque esté nublado.
Sale para mí,
y el tiempo pasa rápido pero pasa bien,
pasa llevadero y hasta pasa contento.
Si bien las responsabilidades siguen siendo las mismas,
entre una y otra respiro primavera y me alivio.
Voy en tiempo de descuento y me permito disfrutar.
Juego con los chicos y canto todo el tiempo.
Lloro de emoción también.
Escribo y hasta actualizo el fotolog.
Armo alguna con amigos aunque sea día de semana.
Terraza y fernet.
Fumo más.
Bares y birra.
Lo pienso todo menos.
Besos y porros.
Como mucha ensalada y helado.
Me río con más facilidad.
Me siento más linda.
Y aunque la vida no me sonríe,
yo le sonrío a ella.
La primavera hace a la vida sonreíble,
(no me importa si no existe esa palabra)
porque todo me hace sonreir.

Y entiendo todos los días, porque alguien escribió una vez: PROHIBIDO SUICIDARSE EN PRIMAVERA