martes, 25 de agosto de 2009

Todavía tu amor me da descargas

El tiempo pasa pero vos permanecés. Ni el de antes ni el de ahora, el mío.
La construcción dinámica y constante que sos para mí.
Nunca supe, aunque alguna vez lo creí, si realmente sos como te pienso. Hace rato que perdí el rastro del límite entre lo real y lo imaginario. Y mientras te escribo esto me pregunto si es a vos a quien te lo escribo, o a mí misma, o a alguien que no existe, o a alguien que existe y no sos vos. Pero entonces lo estoy escribiendo, sea cómo sea te lo estoy escribiendo. Y te lo escribo a vos, a pesar de todo. Y cuando te veo me pasa eso de no saber qué hacer ni qué decir, y tu sonrisa me pierde en tu boca, y cuando noto que estoy idiota, los nervios me juegan mal. Y te declaro culpable de mi insomio cada noche, y te condeno a mi posesión perpetua al despertar. Te hago pagar con besos, en mis sueños, los daños y perjuicios. Y queda descartada la libertad condicional, ni muerto serás libre, porque vos morís conmigo. Sos mi invento, pero con una identidad.

No hay comentarios: